El Parque Nacional Gros Morne se localiza en la costa oeste de la isla de Terranova, provincia de Terranova y Labrador, Canadá. Fue reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987 gracias a su especial geología, en particular ilustra el concepto de la tectónica de placas, ayudando al estudio de la evolución geológica.